
Queremos comprar ¿Por dónde empezamos?
Primeros pasos
Todos sabemos que para adquirir un bien de cualquier tipo, ante todo, debemos saber de qué presupuesto disponemos. Es, sin duda, lo que va a condicionar la futura operación de compraventa. Pero, si esto es así ¿por qué hay tantos compradores que empiezan visitando inmuebles sin saber exactamente cuál es su disponible?
Es evidente que la ilusión y el entusiasmo de querernos ver cuanto antes en nuestro futuro hogar nos anima a empezar a visitar inmuebles, a veces, sin demasiado criterio.
Bueno… si nos sobra tiempo y queremos hacer algo de «turismo inmobiliario» este hábito sería entendible, ya que, hoy por hoy, el agente inmobiliario no cobra honorarios por su tiempo mientras presenta inmuebles a posibles futuros compradores.
Pero, la mejor recomendación que podemos hacer a nuestro cliente es que, ante todo, conozca bien cuál es su situación financiera y su capacidad de endeudamiento. Es decir, visitar una entidad financiera y conocer cuál es nuestra situación real desde el punto de vista financiero.
Y… una vez ya tenemos el dato fundamental de cuál es el disponible con el que contamos, ¿a qué gastos nos enfrentamos ante la operación inmobiliaria que pretendemos?
Habrá que tener en cuenta que, además del precio de venta que pretende la parte vendedora, la operación conlleva otros gastos como el ITP (Impuesto de Transmisiones Patrimoniales) o IVA, dependiendo de las características del inmueble que adquiramos; los gastos de Notaría y de Registro de la Propiedad y, no olvidemos, los honorarios del asesor inmobiliario que nos acompaña durante el proceso: desde las primeras conversaciones, visitas, negociaciones, etc., hasta finalmente culminar la operación ante notario, elevando a escritura pública el contrato de compraventa.
Así pues, antes de empezar a visitar propiedades, estudiemos con qué presupuesto contamos. Ganaremos tiempo y evitaremos alguna que otra decepción..